En este tipo de dieta no se especifican los tipos de alimentos a consumir, pero re recomienda incorporar al esquema de alimentación cantidades abundantes de frutas, verduras, proteínas magras y granos integrales durante los períodos en los que no se ayuna.
Se recomienda el consumo de frutos secos (nueces, avellanas, entre otros) en los momentos del día en que se pueden consumir alimentos, aportando una cantidad importante de proteínas.